domingo, 16 de marzo de 2014

De cocido madrileño con cubertería de plata: Lhardy

LHARDY


Carrera de San Jerónimo 8
Contacto: 915222207

Aprovechando la Ruta del Cocido Madrileño nos hemos decidido a probar por fin el famoso Lhardy que lleva desde 1839 abierto. De hecho, este año celebran su 175 aniversario. Por aquí han pasado y pasan grandes celebridades, tanto que lo de hacer fotos con gente en el salón lo he tenido difícil (y eso que hoy no había nadie famoso). Por tanto, os podéis hacer una idea de los precios que manejan aquí. Nuestro bolsillo no está adaptado a estos precios así que nos hemos limitado a pedir el cocido (que ya son 35,5 euros por persona), agua y postre (que nos ha subido bastante la cuenta).
Una de las particularidades de este restaurante, aparte de su magnífica decoración, es la cubertería de plata con la que puedes comer. Nada más sentarte te ponen un poco de mantequilla y aceitunas con el pan así como dos croquetas por persona a modo de aperitivo. Todo esto por supuesto te lo cobran al final (4 euros por persona).
El servicio es muy rápido y están perfectamente coordinados los camareros de modo que cada uno se encarga de una función según te van sirviendo la comida. 





La sopa es magnífica, lo mejor de todo el cocido, y de las mejores que he tomado. Pero por supuesto no es uno de esos sitios donde te dejen lo que ha sobrado para que repitas. Rápidamente se pasa al segundo donde te ponen un poquito de todo y al final no queda un mal plato. Me ha gustado especialmente la morcilla y los garbanzos aunque no puedo decir que sean los mejores. Al final te preguntan si quieres repetir algo más esperando que contestes que no, pero nosotros hemos tomado más garbanzos ya que se nos hacía el ofrecimiento. Yo hubiera repetido sopa, pero creo que eso no era una opción.


Desde el principio te preguntan si vas a querer soufflé de postre, ya que es su especialidad y deben saberlo con antelación para prepararlo. Nosotros hemos compartido el soufflé (13 euros) con degustación de pastelería variada (11 euros). El soufflé es todo un acierto y es imprescindible si visitáis este restaurante, pero los pasteles francamente sobraban. Si tenéis más ganas de dulce tienen pastelería donde comprar lo que deseéis y a mejor precio. Además, no solo es que no fuera mucha cantidad, es que no eran nada del otro mundo. Ha sido la peor parte de la comida, pero al menos hemos salido satisfechos.

No está mal para darse un capricho alguna vez en la vida pero considero que es uno de estos sitios que son famosos por su antigüedad y le sacan partido a la situación. Hay muchísimos restaurantes y mesones donde comeréis por la mitad igual o mejor que aquí así que yo no lo recomendaría si, como yo, no podéis andaros con grandes lujos.





Y si he salido con peor sabor de boca de este sitio es por la atención del personal. Aparte de habernos tratado de menos desde que hemos pedido solo agua y cocido, han sido muy secos con nosotros todo el tiempo. Y no lo entiendo porque al final nos ha salido la comida por 106 euros (53 euros por persona) que al menos para mi es una buena cantidad de dinero. Solo había un empleado que ha sido amable con nosotros y nos ha explicado que hacen el cocido lentamente durante 14 horas. También es el que nos ha dado la urna para participar en el sorteo de la Ruta del Cocido Madrileño porque los demás a los que se lo hemos dicho han puesto mala cara y nos han ignorado. Lamento no conocer su nombre para mencionarle aunque creo que la opinión sobre este asunto queda bastante clara.
Espero que esto no os eche para atrás a la hora de visitar este restaurante. Simplemente hay que saber a qué tipo de sitio se está yendo y dedicarse a disfrutar únicamente de la comida



http://lhardy.com/

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