¿Quién dice que en Madrid no se puede tomar una gran tapa con la bebida?

BAR SIERRA

Calle Galileo 41

Este bar, no apto para gourmets, es bien conocido por los estudiantes de la zona de Moncloa. Y es que es el sitio donde ponen la tapa más grande de la zona, a un precio más que asequible. Eso sí, que nadie vaya pensando en una comida equilibrada. Este es uno de esos sitios que se abarrotan en hora punta y que te sirven comida del tipo patatas bravas, croquetas, empanadillas, etc. 

De hecho, siempre suelen poner unas patatas bravas con la primera ronda que no están nada mal. Es una ración muy grande, que en otros bares cobrarían fácilmente a 5 euros. En otras ocasiones, me han puesto hasta macarrones con tomate y chorizo. Las empanadillas y croquetas son también un clásico, al igual que los sándwiches mixtos. Con un par de rondas puedes salir comido (por unos 5 euros) o incluso con una si se come poquito, es decir, la fórmula perfecta para el presupuesto de un estudiante.

En verano tienen una terraza (no muy grande) y se está mucho más cómodo. Porque la principal pega de este sitio es que suele estar hasta los topes y no es precisamente un sitio para estar sentado cómodamente tomando algo. La decoración tampoco es algo destacable ya que es un bar a la antigua usanza. Por tanto, todos aquellos que gustan más del ambiente del lugar que del contenido y del buen precio deben abstenerse de visitarlo. 

Rico cocido madrileño en Villagodio

VILLAGODIO

Calle San Agustín 6
Contacto: 913692921

Con motivo de la V Ruta del Cocido Madrileño quisimos probar nuevos restaurantes de los habituales y vimos que en pleno Barrio de las Letras se encontraba este restaurante en el que podíamos tomar un cocido completo con pan, bebida y postre por 20 euros (un precio medio entre los participantes habituales). 

Cocido madrileño de Villagodio

Al llegar vimos que el comedor se encuentra en el sótano, con varios salones y cierta amplitud. Al prinipio estaba vacío pero enseguida comenzó a llenarse por personas que, en su mayoría, estaban tomando un menú de fin de semana por 15 euros. Y es que el cocido que ofrecen en este restaurante nunca podría ser el mejor de Madrid, ya que no tiene nada que lo distinga de otros restaurantes. Sin embargo, nos pareció muy completo y todo lo que probamos nos gustó, especialmente los garbanzos y la morcilla. Algo positivo a destacar es la atención de las camareras, que a pesar de parecer un poco descoordinadas en ciertas ocasiones, fueron muy amables en todo momento y nos ofrecieron repetir de aquello que nos apeteciera. 

Tarta de queso

De postre tomamos una tarta de queso casera muy cremosa, además de unos chupitos a cuenta de la casa. Todo ello con botella de vino por 20 euros. Por tanto, no se puede decir que esté mal de precio aunque no regresaría a tomar el cocido. Considero que este restaurante debe tener otros platos más destacados para pedir si lo visitamos.

http://restaurantevillagodio.com/

THE DRUNKEN DUCK

Calle Almansa 75
Contacto: 915350979

Varias veces he pasado delante de este bar por las mañanas y me he encontrado con un cartel que anuncia su brunch diario por 5,90 euros con café. Eso sí, se trata de un desayuno inglés a base de huevo frito, judías, salchichas, chorizo, bacon y patatas fritas...solo apto para los estómagos más fuertes. He de reconocer que no es el tipo de desayuno que más me guste, pero tenía muchas ganas de probarlo pues por ese precio parecía bastante asequible.

Y efectivamente, el plato es bastante generoso. Por ese precio sirven un plato que casi podría considerarse una comida. Teniendo en cuenta que está disponible hasta las 13h puede ser una buena opción para una comida temprana, vamos lo que viene siendo un brunch, o bien un desayuno temprano ya que abren bien temprano (7 a.m.).

Sea como sea si os gusta este tipo de desayuno no dudéis en pasaros por aquí, porque la relación calidad-precio está fenomenal. He estado en otros como Bristol Bar y aunque me han gustado, no disfruté tanto de la cuenta. Aquí, posiblemente por la influencia de la universidad, podemos disfrutar de un buen brunch a un precio muy asequible y además sin tener que esperar a que sea fin de semana para tomarlo.