Poniéndonos morados en Sumosan: buffet asiático a la carta

SUMOSAN

Calle Modesto Lafuente 88
Contacto: 915531795

En Nuevos Ministerios tenemos una amplia oferta de restaurantes de todos los tipos. Uno de ellos es Sumosan, que nos ofrece, el cada vez más popular en los restaurantes asiáticos, un buffet a la carta por 10,50 euros entre semana y 15,50 euros en días festivos (bebida aparte). En cuanto se pide sushi es fácil amortizarlo, pero para los que no os veáis capaces tienen otro tipo de menús que no implican tanta comida.

En nuestro caso es una oportunidad perfecta para darnos un homenaje con este plato que tanto me gusta.

Hay una gran variedad de platos entre los que elegir (toda la parte de la izquierda de la carta) aunque no incluye platos básicos como Dim Sum o Gyozas. Sin embargo, se puede pedir una ración por un precio adicional que no es muy alto (1 euro por cada ración). Es lo que corresponde a la opción Premiun del menú que podéis ver en la parte derecha de la carta.

Ensalada de goma wakame

Nosotros comenzamos con unas ensaladas de algas. la típica de goma wakame y otra con un alga negra cuyo nombre lamentablemente ya no recuerdo. Ambas estaban bastante buenas, muy sabrosas, aunque la común (con algas verdes) es una opción más acertada a mi parecer. También pedimos un plato de Kin-chi, que es una verdura muy consumida en Corea, parecida a la col fermentada. De nuevo bastante bueno, siempre y cuando os guste la col y platos similares. 

Ya nos íbamos dando cuenta que no es un restaurante asiático convencional, ya que nos daba opciones muy originales para comer, que siempre es de agradecer cuando, como a nosotros, te gusta comer platos diferentes y experimentar.

Kin-chi

Sushi variado

A continuación , comenzó a llegar el sushi. Pedimos prácticamente todo el sushi que se podía pedir en la parte izquierda de la carta. Aunque no es el mejor que he tomado, no estaba nada mal, sobre todo los California Roll. Los de surimi y aguacate envueltos en cebolla frita son un  imprescindible en vuestra comida. También quisimos probar los temakis, que es el tipo de sushi que menos me suele entusiasmar. Sin embargo, aquí me gustó muchísimo, sobre todo el california. En la foto podéis ver que los probamos todos. Y lo volvería a hacer.

Por supuesto en nuestra visita no podía faltar un plato de Dim-Sum y otro de Gyozas, que como ya he comentado más arriba, implican un suplemento de 1 euro por plato. Sin embargo, merece la pena cuando te gustan tanto como a mi. Si tuviera que escoger, me quedaría con las Gyozas. No es porque el Dim-Sum no me gustara sino porque era más convencional que el resto de platos.

Dim-sum

Gyozas

Yakitori

El último entrante que pedimos fueron unas brochetas (yakitori) de varios tipos. Bastante buenas aunque sin mucho misterio. Es una buena opción si no os queda mucha hambre para un plato principal. Sin embargo, es lo que menos destacaría de la comida en mi opinión.

También quisimos probar platos más contundentes y pedimos uno de cada tipo. En la parte del ramen pedimos el Sumosan Ramen que consiste en una sopa con fideos y carne a la que le añaden en este caso huevo. Desde luego no era un plato ligero pero sí muy original. No creo que lo volviera a pedir porque al tratarse de un buffet se puede hacer un poco pesado, perso estaba bastante bueno y puede ser una buena opción para un día de frío.

Sumosan Ramen

Tallarines fritos

Por otro lado, probamos en Donburi con pollo, que es un plato a base de arroz. Este plato se parece más a los que podemos encontrar en otros restaurantes asiáticos, pero es una buena opción para acompañar otros platos. Otro plato típico es el de tallarines fritos, que para mi no puede faltar en ningunacomida asiática que se precie.

Donburi con pollo

En este punto ya estábamos bastante llenos pero teníamos mucha curiosidad por probar la fondue japonesa (escogimos la shabú-shabú). Te traen un aparato donde se calienta agua y verdura, carne y pescado congelada para cocerla en la propia mensa. Son solo unos minutos pero si no os apetece estar haciéndoos comida, tampoco os perdéis nada porque aunque el alga que está en el agua da algo de sabor no es comparable al resto de platos. No me arrepiento porque fue lo más original de la comida, que de por sí era diferente. Pero no repetiría de nuevo con este plato.

Fondue japonesa: shabú shabú

Y aunque no lo he mencionado hasta ahora, la guinda del pastel fue la excelente atención de los empleados, que en todo momento estuvieron atentos y con una sonris, siempre dispuestos a explicarnos en qué consistía cada plato.
Desde luego todo un acierto y a un precio muy asequible para la cantidad de comida de calidad que se puede tomar. ¡No os arrepentiréis!